La Playa de La Albufereta es
el objetivo de nuestro “viaje en el tiempo” de esta semana. Un mal cálculo
(indigno hasta de un principiante) nos hizo ir a Diego, su hijo Pau (que no
tenía ninguna culpa, la elección de la hora fue de los fotógrafos) y a mí, a
hacer las fotos cuando el sol se encontraba justo delante de nosotros,
ofreciéndonos un incómodo contraluz que dificultaba ver con detalle lo que
andábamos buscando.
El contraluz nos dejó probar otras cosas
Resolvimos la situación como
se debe: nos fuimos a desayunar.
Por la tarde del domingo
volví con Julia a hacer las fotos. Por los pelos. Sí, esta vez el problema era
que salimos tarde y fuimos paseando y cuando llegamos el Sol se empezaba ya a
esconder por detrás de la Serra Grossa, proyectando su sombra cada vez más
rápido e invadiendo la escena.
Al ya tener comprobados los sitios de toma, fue cuestión de unos minutos hacer las fotos. Aquí podéis verlas.
Zona de la playa hacia el norte
Vista de la playa de La Albufereta
El cambio que se observa es, una vez más, enorme.
Fotos de Diego Escolano y mías.
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