martes, 1 de septiembre de 2015

SYLVIA CANTILLANS


Un centenar (o más) de currucas carrasqueñas lleva Toni Zaragozí anilladas en Les Puntes de Gosàlbes, a las afueras de El Campello, en poco más de una semana (y sin anillar todos los días). Toni y sus colaboradores están (estamos) sorprendidos del excelente rendimiento que está dando ese lugar, que en una primera impresión, no parece ser tan interesante para esta actividad. La abundancia de espino negro (cuyo fruto es muy apetecible para estas aves) es una de las posibles claves.

Espino negro.


También, en estos días, se han anillado papamoscas gris, curruca cabecinegra, curruca tomillera y curruca mirlona.

En la sesión de esta tarde, además de Toni, hemos estado Iñaki y yo (finalmente (muy al final) he podido incorporarme) y hemos anotado otras once carrasqueñas más a la lista. Casi todas son jóvenes, pero también caen algunos adultos.

Curruca carrasqueña (juvenil).

Curruca carrasqueña (adulto).

Curruca mirlona.

Curruca tomillera.

A última hora, un bando de unas 20-30 golondrinas jóvenes (sus cortas colas las delataban) ha estado revoloteando cerca de las redes pero no hemos tenido suerte.

Parte del bando de golondrinas.
                 

También pasan un par de helicópteros y un avión contra incendios que vuelven al aeródromo de Mutxamel tras apagar un fuego en Altea. Esperamos que no haya sido grave.

Helicóptero del 112.


Casi a la hora de recoger las redes han aparecido cuatro murciélagos de buen tamaño. Quizás fueran orejudos, como el que atrapamos hace un tiempo no muy lejos de allí. También un pipistrellus se decide a ocupar el cielo ya del atardecer.

Esta hormiga estaba decidida a llevarse al escarabajo al hormiguero. Con muchos esfuerzos, el escarabajo ha conseguido finalmente quitársela de encima.


 →Actualización (05-09-2015) aquí

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