Necesito
del mar porque me enseña:
no sé si
aprendo música o conciencia:
no sé si
es ola sola o ser profundo
o sólo
ronca voz o deslumbrante
suposición
de peces y navíos.
El hecho
es que hasta cuando estoy dormido
de algún
modo magnético circulo
en la
universidad del oleaje.
(Pablo Neruda).
El pasado domingo 7 estuve en
la playa de la Almadraba haciendo unas fotos del anochecer. La ventosa jornada anunciaba unas buenas imágenes.
Recordé alguna foto que saqué anteriormente de los reflejos de las últimas luces sobre las aguas y volví a retomar ese tema.
Me parecen unas imágenes muy surrealistas y sugerentes, con una gran carga subjetiva y que captan inmediatamente la atención por sus formas y colores de la más pura sicodelia.
Retomaré nuevamente este tema.
Así que aquí tenéis algunas de esas fotos. Espero que os gusten.
Preciosas todas.
ResponderEliminarMuchas gracias por tus comentarios
EliminarMaldición, y ahora que hago con las fotos que tengo. Pardiez.
ResponderEliminarPreciosas!!! Yo también soy gran amante de estos "reflejos" y de estas primeras o últimas luces. Qué agradable encontrar un alma gemela!
ResponderEliminar(Voy a enlazarte con mi blog, no quiero perderme ni una entrada!)