Día 27. Visita a humedales de
Santa Pola. La primera parada es en la Torre del Tamarit donde lo más reseñable
es un bando de 15 espátulas que
vuelan al fondo y 9 garcetas grandes
repartidas por allí. Me encuentro allí con Eugenio Castilejos y su familia.
En El Pinet localizo un correlimos gordo. No lleva anillas de
colores por lo que es otro ejemplar distinto al que se ha visto estos últimos
días. Hay un grupo de unas 50 agujas
colinegras descansando aunque poco después vuelan más al centro de la
salina. Cuento más de 300 chorlitos
dorados en una isleta (minutos más tarde, Jacobo contó 621 ex.).
Muchas veces nos emociona ver
una rareza y tenemos razones para ello. Hace nada, un amigo, respecto a la
observación reciente de un especie muy rara en nuestra zona, decía acertadamente
que “bravo por disfrutar de un pájaro que solo se ve una vez en la vida”. Pero,
en mi opinión, no debemos caer en el error de menospreciar un espectáculo como puede
ser ver esos cientos de aves con sus tonos dorados brillando al sol de la
mañana. Un simple gorrión común, tan “olvidado” por tanto ornitólogos se merece
(y con mucho) dedicarle un tiempo de nuestras observaciones.
Acabamos dando un breve vistazo
en la playa del Pinet. Un chorlito gris,
un par de correlimos tridáctilos, un
chorlitejo chico y un par de vuelvepiedras dan vida a la orilla. Mar
adentro, dos alcatraces atlánticos, gaviotas patiamarillas, gaviotas de Audouin y otras gaviotas más
cerca de la piscifactoría.
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https://ebird.org/spain/checklist/S157224495
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